miércoles, 20 de junio de 2007

DANIELA LUNA: NUEVA GENERACIÓN DE GALERISTAS por Laura Batkis



Hace dos años Daniela Luna abrió “Appetite”, una galería de arte en el barrio de San Telmo. Generó un entusiasmo instantáneo en todo un grupo de coleccionistas que apoyaron su proyecto juntando un público que entrecruza roles, profesiones y actividades diversas. Acaba de inaugurar el “Nuevo Appetite” un espacio de 400 metros cuadrados y en breve abre “Tanto Deseo”.

Arte al Día: ¿Cuándo se inauguró la galería Appetite?


Daniela Luna: En junio de 2005. La idea surgió cuatro años antes. Yo tenía en mente el nombre y una idea de hacer algo con el arte. Después fue tomando un formato de galería, que es el inicio de un proyecto más amplio.


AAD: ¿Cuál era la idea cuando abrió Appetite?


DL: Hacer una galería trabajando con artistas que no estuvieran tan desarrollados pero con un gran potencial a desarrollar, y darles esa oportunidad. Incentivarlos a que crecieran, que tomaran riesgos y que se involucraran mucho más con su obra.


AAD: ¿A usted le interesa trabajar desde la preproducción de la obra?


DL: Sí. Establezco una relación con los artistas, en la que nos elegimos mutuamente. Y los dejo que en este espacio puedan experimentar.


AAD: ¿Cómo se está ampliando el proyecto inicial?


DL: El “Nuevo Appetite” lo abrí en Chacabuco 551 el 15 de octubre del 2006. Mientras tanto, el sitio donde estaba antes la galería (Venezuela 638) se está remodelando para ser un espacio que se va a llamar “Tanto Deseo”. Es también una galería pero mezclada con objetos y otras cosas, todo relacionado con deseo la sensualidad y el erotismo.


AAD: Appetite se puso de moda muy rápidamente, ¿a que atribuye este suceso?


DL: Hay un entrecruzamiento de gente de todo tipo. Una de las prioridades de este proyecto es que no sea solamente para un sector exclusivo. Me interesa poder trabajar con gente del arte pero también con el caminante que pasa por la calle, turistas, gente del exterior, coleccionistas. Se trata de poder manejar todos los públicos, porque todo el mundo tiene cosas para relacionarse. Busco artistas que profundicen mucho en un mundo personal. En general es muy difícil que alguien entre a Appetite y que no le pase nada, una vez que vienen, empiezan a frecuentar el lugar. Varios de los coleccionistas conocidos han pasado por Appetite. Me interesa ese público pero también dar cabida con la gente que pasa, mira por la vidriera y entra. Aunque no compren nada, es un público que a los artistas les sirve para recibir opiniones que no vengan siempre del mismo circuito.


AAD: De lo cual se desprende que usted provoca el encuentro entre el artista y la gente.


DL: Sí eso me encanta, ver la relación que se establece con la gente que no sabe que está frente a una obra de arte, se encuentra con algo y lo descoloca. Porque con lo que ya está legitimado como artístico ocurre que el espectador va a verlo anticipándose en una respuesta ya formateada y entonces se pierde la espontaneidad. Esa espontaneidad la busco también en los artistas, cuando usan el espacio como si fuera propio. A veces ocurre que vienen y se ponen a jugar con cinta adhesiva y otro se lo sigue y van armando un especie de obra espontánea en el momento, y esas cosas después quedan.


AAD: ¿Sería una obra generada a parir de una improvisación?


DL: Sí, pasaba mucho en el Appetite de la calle Venezuela. Por ejemplo uno venía y colgaba una cáscara de banana en un cable y otro le enganchaba otra cosa y terminaba haciéndose siempre algo y lo que me interesaba era eso que al no estar tan definidos los límites, la gente también se sorprendía mucho más con cosas que no saben si son arte, si es obra que se vende o no. Que no sepan si algo es arte o una bolsa de basura. Me interesaba mucho hacerlo en un espacio como el de la calle Venezuela, más acotado. En este nuevo sitio en la calle Chacabuco se pueden generar más situaciones porque son 400 m?


AAD:¿ Es un proyecto empresarial?


DL: Sí, como una empresa, tengo todo planificado y proyectado. Ya sé lo que quiero que ocurra de acá a un año. A veces depende más de la suerte que uno puede tener, porque es difícil llevar a cabo algo así con el arte contemporáneo.


AAD: ¿Cómo se sustenta económicamente?


DL: Gran parte fue a partir de las ventas del año pasado. Tuve una estrategia de ventas que fueron muy buenas y conseguí juntar el dinero para poder invertir en todo esto. Por otro lado pedí un crédito para hacer las remodelaciones y ahora sigo basándome en las ventas hasta que haga otro proyecto.


AAD: ¿Cómo sigue el crecimiento de los 2 espacios?


DL: Abriendo un bar en “Nuevo Appetite”. Quiero que sea más una experiencia que una galería típica. Que la gente venga a ver una muestra pero que además puedan quedarse y discutir sobre lo que vieron con amigos y generar otra manera de vivir.


Perfil


Daniela Luna nació en 1977 en Buenos Aires. Estudió 3 años de Administración de Empresas en la UBA, cine en el CIEVyC. Practicó Kendo (arte marcial de combate), lo cual considera una experiencia que marcó su manera de encarar su vida personal y su empresa.



nota: DANIELA LUNA: NUEVA GENERACIÓN DE GALERISTAS por Laura Batkis. Revista Arte Al Dia.
http://www.artealdia.com/content/view/full/66925

lunes, 14 de mayo de 2007

Martín Legón es un contador de cuentos pero con imágenes. Por: Ana Martínez Quijano


Baselitz, un neoexpresionista alemán,
signa la obra de Martín Legón
que se expone en la muestra colectiva de Praxis.


Dos galerías (en un caso individual, en otro colectiva) dedican sus espacios al joven artista

La galería Appetite, espacio que surgió como alternativo hace dos años y se asimiló con rapidez al circuito de galerías porteñas, presenta en estos días una serie de pinturas de Martín Legón. La muestra, «Abril es el mes más cruel», al igual que el poema de T. S. Eliot que la inspira, habla de la desesperación, la desdicha y la degradación del amor. «Abril es el mes más cruel, hace brotar/ lilas del interior de la tierra muerta, mezcla/ la memoria y el deseo, estremece / las raíces marchitas con lluvia de primavera», escribió Eliot.

En la docena de obras que ha pintado Legón, se reiteran con escasas variaciones, el paisaje, un bosque amenazante, y los mismos personajes: una muchacha, un joven y dos perros. El dramatismo de cada una de estas escenas, está exaltado por el gesto expresivo por unas pinceladas negras que cubren los intensos rosas, lilas y azules de esas visiones nocturnas y sombrías. La oscuridad del tema coincide con el clima angustiante e irreal de la obra. En algunas pinturas, los rasgos de la joven aparecen deformados o enmascarados, del mismo modo que se transfiguran los rostros en un mal sueño.

El espíritu de la tragedia, que sobrevuela en la obra, llega sin embargo atenuada al observador, como llegan los relatos de ficción. Legón es un contador de cuentos que presenta imágenes tabicadas, como si fueran las ilustraciones de un libro que se ha perdido, y cuyo relato deberá imaginar el espectador. Esta posición distanciada, hace que el estilo del sufriente y torturado del lenguaje expresionista que Legón utiliza sin reparos (el de Munch o Ensor), se torne decididamente actual.

Así, las sucesivas apariciones en la obra de heridas, gestos de estupor, rastros de accidentes o una vegetación con formas anómalas, son símbolos del dolor y, a la vez, datos que ayudan a adivinar la historia.

Dueño de una formación literaria que contamina la obra, el joven Legón dice: «Suelo imaginar como seguirán las películas una vez terminadas, cómo los personajes siguen su vida. Adoro los personajes secundarios, o terciarios, esos que hacen bolos o aparecen caminando por detrás de la escena. Siempre me pregunto si significará algo para esas personas haber estado ahí. Creo que todo lo que hago lo hago para traer una imagen nueva al mundo, algo que no existía. Creo que hay algo de grito de desesperación en esto. Solo estoy seguro de que en el arte todo depende de cómo se argumente, no hay nada más sincero ni más falso que una obra de arte».

Mientras en Appetite Legón presenta esa imagen nocturna y atormentada, en una exhibición colectiva de la galería Praxis, muestra un retrato despojado que ostenta la frescura de una instantánea, pero con la misma vocación narrativa. Un detalle, el nombre de un pintor, Baselitz, impreso como una marca sobre el buzo de una chica, genera interrogantes.

Desde el punto de vista documental, el nombre del neoexpresionista alemán que en la década del 60 decidió pintar los personajes de sus cuadros al revés, aparece en la obra de Legón como una información que induce a contemplar el retrato para descubrir cuál es el vínculo entre la chica y el artista.

La obra se llama «Baselitz como propaganda» y revela en parte la psicología del personaje. La chica usa lentes, es joven, ha posado serena frente a su retratista con una mirada ausente y se ha pintado los labios de color rojo, acaso para la ocasión. Todo lleva a imaginar esa escena. Pero más allá de las apariencias, de su pelo oscuro y los rasgos regulares, más allá del gesto disciplinado del cuerpo, se percibe una actitud distante. Ella aparece pensativa y melancólica. Si todo retrato implica una pregunta que apunta a descubrir quién es el sujeto, esta protagonista elude la respuesta con su expresión ensimismada.

El nombre, Baselitz, escrito en el buzo con la tipografía de las marcas deportivas y con la triste luminosidad de un viejo cartel de neón, se convierte en un dato clave. Pero ¿es un hecho casual, una marca elegida al azar que podría ser cualquier otra y que no guarda relación alguna con el personaje? La mirada espera una recompensa. ¿Cuál es el límite del afán interpretativo y el deseo de saber qué es lo que vemos? La simultaneidad entre lo marginal (el nombre, Baselitz) y lo central (la chica), torna importante cada detalle.

Mientras en la corriente intersubjetiva que fluyeentre la jovencita y el autor de la obra se adivina una fragilidad compartida, una sensible y delicada moderación que permite sortear la incomodidad habitual del retrato, la exploración humana de Baselitz, delata el gesto brutal de quien se apropia por la fuerza de la identidad de sus personajes.

Al igual que en la cita final de «El nombre de la rosa» de Eco, que dice que de la rosa que se marchita sólo nos queda su nombre, y así como a través de este concepto la extensa simbología de la rosa se abre a las múltiples interpretaciones del lector, Legón pareciera insertar y poner al servicio de su obra el nombre de un pintor, acaso como recurso para abrir camino a la imaginación. La misión está cumplida.

Así, sencillamente, a través de las conjeturas que el observador del retrato se forja sobre la labor rutinaria y a la vez compleja del artista, crece y se construye el sentido de la obra con la visión del que mira, mientras los ojos vagabundean por la pintura.

fuente: Martín Legón es un contador de cuentos pero con imágenes por Ana Martínez Quijano. Espectáculos de Ambito. Lunes 14 de Mayo de 2007, Edición N° 2387

miércoles, 25 de abril de 2007

Yamandú Rodríguez, Marcelo Galindo, Kuki Benski y Daniela Luna en Gallery Nights



VIERNES 27 DE ABRIL, 19 hs.
Appetite y Tanto Deseo invitan
Gallery Nights en La Europea, Arenales 1415:
Yamandú Rodríguez, Marcelo Galindo, Kuki Benski y Daniela Luna http://www.hostnews.com.ar/2007/prov/abr/020277.htm

Pueden ir un rato y después venir a APPETITE

INAUGURACIÓN Legón - Mastracchio - Guzmán (abril-mayo)


Viernes 27 de abril, 19 hs.
Inauguración de Martín Legón, Nicolás Mastracchio y Mauro Guzmán
APPETITE - Chacabuco 551

Abril es el mes más cruel - Martín Legon
Objeto oscuro del deseo - Nicolás Mastracchio
I feel like Linda Blair - Mauro Guzmán
Continúa:
Modelización Psicogeométrica IV - Marcela Sinclair

miércoles, 28 de marzo de 2007

ARIEL CUSNIR inaugura RIO ABAJO en el CCRecoleta, 30/03 a las 19 hs.

INAUGURACIÓN: viernes 30 de marzo, 19 hs.
C.C.Recoleta - Junin 1930 sala 15
Rio Abajo de Ariel Cusnir

"To find Appetite, an avant-garde gallery that everyone I met recommended, I had to return to one of San Telmo's less atmospheric blocks. Pop-punk exuberance is Appetite's stock in trade, its walls (and floors) are covered in a profusion of styles, from Ariel Cusnir's paintings of idealized tropical islands [...to...] a production of Mr. Cusnir's art — complete with sand, palm tree and big model helicopter."

viernes, 23 de marzo de 2007

Estudio Abierto Centro 2006 - Dominó Imperial - Curaduría Rafael Cippolini



Rafael Cippolini: "... La escala monumental multiplica la interpelación: Estudio Abierto es un gran espectáculo y fuimos respondiendo al desafío diseñando estrategias curatoriales que desde la praxis determinan un itinerario atractivo por lo heterogéneo. Por ejemplo, González convocó a un muy diverso grupo de artistas para un colectivo que fue elaborando decisiones plurales."

Según Rodrigo Alonso: "... Trabajé a partir del diálogo entre obras y espacio. Pensando que el público llegaría al tercer piso luego de haber recorrido los anteriores, decidí incluir muy pocas piezas pero de mucho impacto, como una especie de invitación a bajar el ritmo de la visita. De hecho, dos de las tres obras que ocupan ese recinto son en cámara lenta; la tercera está basada en testimonios que requieren el detenimiento y la atención. Por otra parte, puse énfasis en la espacialización de las imágenes, proponiendo un contacto más inmediato, casi íntimo, con el universo audiovisual..."


fuente: Vasos comunicantes. Arte - LA Nación
http://www.lanacion.com.ar/Archivo/nota.asp?nota_id=862227
26 de noviembre de 2006

VERÓNICA GÓMEZ. "El Conejo: Estudios Preliminares. Laboratorios Baigorria S.A." por Javier Villa

La estructura del absurdo parte de un desplazamiento y luego todo se desliza lógicamente; la verosimilitud se sostiene al mantener el tono del sistema elegido; mantener el tono del desplazamiento a fondo es lo que provoca gracia y extrañamiento. La primera vez que visité Laboratorios Baigorria S.A. me acordé de esta fórmula básica que le había arrancado a Esperando a Godot.

Ese día no conocí a la responsable principal del emprendimiento, la Lic. Laura Baigorria. De hecho, todavía no nos cruzamos: siempre se excusa con un viaje a Papúa Nueva Guinea para establecer relaciones zoológicas en una selva virgen o con una gripe aviar contagiada en un rapipollo de Ramos Mejía. Pero sí mantuve un contacto asiduo con su asistente.

En la primera visita quedé registrado en las actas como auditor externo. Discutimos con el personal presente sobre las libertades que puede generar un proyecto con una fuerte imposibilidad inicial. Indudablemente, las zonas potenciales de investigación se expanden cuando no se pone mucho esfuerzo en pretensiones que a menudo resultan limitantes. Por ejemplo, que en sus comienzos un proyecto no negocie con las fórmulas de exhibición acostumbradas: Laboratorios Baigorria S.A. funcionó tres años a puertas cerradas en un ambiente 3x3. Este régimen privado de producción y circulación no sólo le permitió a la institución construirse su propio contexto de existencia, sino que también fue tejiendo de a poco un marco simbólico para que las piezas dentro del conjunto sean más que parcialidades dentro de un corpus y formen parte de una entidad inexhibible. Esta entidad inexhibible evidencia lo obsoleto que para cierto tipo de trabajos pueden resultar los mecanismos de puesta en escena del circuito contemporáneo. Si bien el laboratorio se traslada por primera vez desde su sede central a una sede temporaria, la obra (Laboratorios Baigorria S.A.) excede a su muestra (El Conejo. Estudios preliminares).

La segunda vez que pasé por el establecimiento tenía una invitación formal para realizar una jornada de experimentación. Me acompañó un grupo de gente con la que debía multiplicar una especie porcina determinada. Una vez formada la piara y por medio de un contrato de pastaje, arrendábamos un predio que debíamos pagar semana a semana para que nuestros ejemplares sean alimentados, observados e investigados por el personal del Laboratorio. La experiencia condensó todo tipo de papelerío burocrático, varios informes de comportamiento con sus respectivas imágenes, relaciones laborales con otras instituciones y más cuestiones semejantes. El producto final, estético y narrativo, se alimentaba parasitariamente de los lenguajes científico y administrativo, atravesándolos con una línea anticuada, obsoleta y poética. El absurdo de la experiencia lograba reformatear la vieja relación entre arte y ciencia mediante la exploración lúdica e irónica de sus límites.

Así operó el laboratorio en los últimos tres años: cada experiencia dura alrededor de un mes y en ella trabajan el personal requerido y un invitado que actúa, a su vez, como cómplice de la ficción y la construcción del absurdo, coautor de algo que lo excede y espectador ideal de todo el asunto.

Esta sede temporaria y los trabajos de campo que se realizarán en otras instituciones dan inicio a una nueva etapa: la ampliación de los objetivos programáticos del laboratorio.

Javier Villa.
Agosto 2006.

El Conejo. Estudios Preliminares.
Verónica Gómez. En Appetite. Buenos Aires. Agosto-septiembre 2006.

miércoles, 14 de marzo de 2007

La galería de arte Appetite estrena espacio y sigue creciendo

Será el próximo viernes 16 en un enorme galpón de San Telmo con las exposiciones "Pandillas de verano" de Anabella Papa y "Pinturas Parlantes II" de Gustavo Marrone. Dirigido por Daniela Luna y a menos de dos años de su apertura al público, tuvo un meteórico crecimiento: obtuvo gran éxito de ventas en las últimas ediciones de arteBA y Expotrastiendas y llegó a cosechar elogios hasta del The New York Times.

por Mercedes Ezquiaga

La galería de arte Appetite, que dirige la joven Daniela Luna, estrenará nuevo espacio el próximo viernes, en un enorme galpón de San Telmo con las exposiciones "Pandillas de verano" de Anabella Papa y "Pinturas Parlantes II" de Gustavo Marrone.

A menos de dos años de su apertura al público -en otro local muy cerca del actual-, esta joven galería tuvo un meteórico crecimiento, obtuvo gran éxito de ventas en las últimas ediciones de arteBA y Expotrastiendas y llegó a cosechar elogios hasta del prestigioso diario The New York Times.

Los artistas, que en su mayoría rondan los veinte años, realizan objetos, pinturas, perfomances, videos o instalaciones de llamativa presencia, con muchos colores, texturas y materiales tan diversos como útiles escolares, telas, cera, telgopor, stickers, brillantina y hasta muñecos de plásticos derretidos.

"Son todos artistas de gran diversidad que asumen riesgos y que tienen un espacio para experimemtar", señaló la mentora del espacio, Daniela Luna, en una entrevista con Télam.

La trastienda de la galería alberga obras tan llamativas y diversas como las sutiles acuarelas de Ariel Cusnir, las instalaciones con amimales disecados de Nicanor Aráoz, las imágenes religiosas sobre telas y lentejuelas de Mercedes Cosci o una suerte de diario íntimo de tela cocido sobre una enorme colcha de Victoria Colmena.

El imaginario de los artistas, de lo más diverso y "delirante", salta de una pintura que exhibe un enorme delfín rosado con cuerno de unicornio envuelto en un arco iris (de Nicanor Aráoz) a las piedritas de los gatos cruzadas con posavasos chinos de colores (Fabio Risso).

Muy cerca de allí se puede ver la obra de Rafael González Moreno, quien armó collages con los típicos letreros fluorescentes de kioscos y bares, rodeados de estrellas metalizadas, enfrente de las enormes flores de femenino diseño de Yanina Szalkowicz y muy cerca de las eróticas y hardcore fotografías de Yamandú Rodríguez.

"Rafael González Moreno estuvo viviendo en Suecia y cuando llegó acá quería hacer su ’wonderland’: un lugar que llenara todo, que no se pudiera respirar, que fuera todo color. Para mí está bueno que los artistas de esta galería se saquen las ganas, pero que lo hagan en serio, exageradamente, como para que den paso a la evolución", contó Luna.

"Después de eso -continuó la galerista-, Rafael empezó a hacer una obra mucho más relajada, limpia y empezó a derretir juguetes en sus cuadros, que son geniales", explicó la joven en una recorrida por la galería.

Al fondo del espacio (de 400 metros cuadrados) reside la instalación de Gustavo Marrone, titulada "Pinturas parlantes II", en las que el artista propone un diálogo entre "lo pictórico, la palabra, el texto, la articulación de las ideas, la reflexión irónica y melancólica y la ilusión de renovarse mutuamente".

Por su parte, Anabella Papa pintó enormes y coloridos cuadros de grupos de chicos, tomados de cerca, sonrientes en algunas imágenes, peleando en otras, en su muestra titulada "Pandillas de verano".

Para la multifacética dueña de la galería (artista y economista), este espacio de imponente y llamativa presencia era algo que estaba haciendo falta y no ocurría, por eso el camino para el proyecto se abrió con tanta rápidez y fluidez, juzgó.

"Cuando decicí abrir Appetite, venía de ver muchas galerías de afuera y llegué acá y tuve la sensación de que algo estaba brubujeando y que estaba por explotar y era el momento exacto para hacerlo", aseguró.

En el espacio anterior, donde funcionó Appetite en sus inicios, se inaugurará un espacio llamado "Tanto deseo" donde las obras en exposición estarán excusivamente relacionadas con temas de sensualidad y erotismo.

Además, los múltiples proyectos de Appetite incluyen la futura inauguración de "Devorame", un espacio para los proyectos particulares de los artistas de la galería -como diseño de ropa o arreglos florales- y una exposición en el Centro Cultural Borges, a donde fueron invitados a mostrar su obra, con la curaduría de Luna.

fuente: Telam (Agencia de Noticias de la República Argentina), Cultura | Arte. Mercedes Ezquiaga
http://telam.com.ar/vernota.php?tipo=N&dis=27&sec=7&idPub=55566&id=136623
14/03/2007

INAUGURACIÓN: jueves 15 de marzo. 19 hs. DESTROYERS

INAUGURACIÓN: jueves 15 de marzo. 19 hs.
Centro Cultural Borges
Viamonte esq San Martín. PB sala 9
Muestra #19

Destroyers
con Ariel Cusnir - Fabio Risso - Mercedes Cosci - Yanina Szalcowicz - Ana Vogelfang
Curadora: Daniela Luna
Intervención #5
(Ascensores)
Para vivir un gran amor
Ezequiel García

"Harutsuki es una combinación de kanjis que en japonés significa "Luna de Primavera". Durante un tiempo la usé para un proyecto personal creyendo que la combinación era inusual y tenía un sentido íntimo, el que yo le había dado.
Más adelante me enteré que Harutsuki fue el nombre de un destroyer de la II Guerra Mundial.
Con esta revelación el mundo se dio vuelta, todo lo que había creído, intuido, inventado en relación a mi primera idea sobre este nombre de pronto ganó toda otra nueva dimensión. Con ese vértigo inesperado tuve que reacomodar todas mis ideas acerca de algo que había dado por sentado que conocía.
Cuando empecé a conocer la obra de estos artistas, por separado y en situaciones muy diferentes, me causaron una primera impresión de una cierta simpleza y superficialidad, a veces infantil, adolescente, cotidiano.
Pero a los pocos minutos o a los varios días me descubrí aún pensando en esas obras y con sensaciones muy diferentes a las de mi primera y rápida mirada. Que me obligó a esa segunda mirada en la que nada es tan simple, y quizá en algunos casos, tampoco tan alegre o ingenuo como parece.
Por eso sentí una buena idea, o quizá, una mala idea, juntarlos en una muestra.
Además, qué lugar más absurdo (y romántico) que una sala en la entrada de un shopping para exigir al espectador una segunda mirada…
Es una emoción perturbadora la de darse cuenta que debajo de lo que aparenta ser inofensivo puede haber hasta un arma letal."

Daniela Luna, Febrero 2007

Muestra # 19: "Destroyers", del 15 de marzo al 22 de abril
Ariel Cusnir - Fabio Rossi - Mercedes Cosci - Yanina Szalkowicz - Ana Vogelfang